Que el nudismo es un acto social es evidente, los nudistas lo hacemos por que nos gusta hacerlo, nos sentimos bien y por tanto nos agrada que quién nos acompaña y/o rodea haga lo propio.
Muchos, quizás la enorme mayoría, la primera vez que se ha desnudado en algún lugar público, lo haya hecho en solitario, lejos de miradas ajenas y con la inquietud de comprobar cómo iba a ser esa sensación de exponer toda tu piel al aire, el sol y en definitiva ponerse en contacto directo con la naturaleza y comprobar como esa sensación de libertad abrazaba su cuerpo y elevaba su alma. Una vez satisfecha esa necesidad primaria seguramente que se plantee hacerlo de nuevo pero ya rodeado de semejantes. Si no se busca un centro nudista o playa oficial para ese segundo paso, o simplemente pueda ser sobrevenida la ocasión, muy probablemente entre en acción el efecto aquí analizado.
He podido constatar a lo largo de innumerables jornadas en este tipo de lugares, cómo muchísimas veces llegas, te desnudas y actúas con total naturalidad, el que está a tu alcance visual te observa, como es la persona de la que antes hablaba está deseando hacer lo propio, al poco rato lo ves quitándose el inútil bañador. Va y se baña, ya cuando vuelve es otra persona. Incluso a veces quienes te acompañan y son reacios acaban"contaminándose"al verte tan natural y cómo disfrutas sin importarte en absoluto tu desnudez.
En algunas ocasiones y lugar concreto, he vivido como se ha llegado a revertir una situación que podría haber sido totalmente distinta si el nudista no duda en estar como desea, le pide el cuerpo y el lugar. Llegan a un sitio y ven a alguien desnudo y dudan, hay algunos con bañador, poco a poco van cayendo...al rato todos desnudos...el efecto dominó haciendo de las suyas...
A mi también me gusta estar desnudo
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