En cambio en esta temporada que ahora toca a su fin, se ha erigido como las más visitada por nosotros. Esto se ha debido principalmente a la imposibilidad de disfrutar de Cala Arenas, seriamente afectada por la invasión del alga Rugulopteryx okamurae. Como quiera que Cala Arenas es la playa más cercana a nuestra residencia tuvimos que echar mano de nuestros recursos para sustituirla, al menos temporalmente.
El lugar en concreto está comprendido entre el par de altas torres de apartamentos de Torreguadiaro hacia el sur y las rocas que la separan de Cala Sardina al norte. En mitad de este tramo de costa se encuentra el pequeño hotel de La Milla de Plata, del cual toma su nombre la playa. La mitad sur, o sea entre el hotel y las torres de apartamentos, es la más tranquila para el nudismo y aunque tiene más rocas siempre es posible darnos un refrescante remojón en sus transparentes aguas. Allí hemos visto a algunos que otros practicando nudismo, siempre sin conflictos con los demás bañistas.
El caso es que finalmente se ha convertido en un lugar muy aprovechable, cercano, tranquilo y de fácil acceso. Allí hemos disfrutado de muchas jornadas de nudismo y en justa medida lo menos que podríamos hacer es brindarle un pequeño homenaje mediante unas cuantas fotos con la intención de que os sean sugestivas.
Como siempre esperamos que estas líneas y fotos animen a frecuentar este lugar a aquellos que gusten de eso de desnudarse para disfrutar en toda su piel las sensaciones del nudismo.
Paz y tranquilidad.
En primer término las torres de referencia que delimitan la playa, al fondo Gibraltar y Jbel Musa, las míticas columnas de Hércules.
Las rocas dan mucho juego.
La transparencia y vida en el agua son características del lugar.
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